sábado, 29 de mayo de 2010

Llueve en Buenos Aires...

y como de un arcón recién abierto van apareciendo formas e imágenes perdidas en el tiempo.
Hoy, 29 de mayo, Mariano cumpliría 59 y, quizás, lo hubiera llamado para saludarlo, o le hubiera escrito, o tomaríamos un café él, su Giulia y yo... pero llueve en Buenos Aires, Mariano ya no está, me tomaré un café con Giulia un día de éstos, y  entre las gotas que caen por el cristal de mi ventana pasan las imágenes borrosas del tiempo, mientras algún pájaro cierra la tarde cantando desde las ramas ya raleadas de mi tilo.
No quiero que esto se parezca a la tristeza, pero los enormes huecos que las ausencias van dejando se llenan de dolor primero y luego, como los poros de una piedra expuesta eternamente a la intemperie, van guardando en su interior el polvo de los vientos, el agua que se seca y deja una resaca endurecida y así, de tiempo saturados, se van sellando en el mismo contorno de la piedra y la conforman y ese dolor y esas ausencias pasan a ser la vida misma con su crisol de sueños y esperanzas y partidas y promesas y adioses y distancias...

martes, 18 de mayo de 2010

Encontré en un viejo disco el mail que le dio origen a este lugar...

Sent: Monday, January 01, 2001 8:47 PM



Subject: SE REABRE LA MITROPA-POR FAVOR, DE A UNO-NO ATROPELLAR

Y así fue como llegó el principio de milenio...

Entre corridas, como siempre, tiempo que no alcanza... cosas que se escapan... sensación de olvidos...

La Mitropa parece no querer despertar del letargo finisecular...

Sin embargo...

Sin embargo sabemos que todo sigue ocurriendo... como ocurría la vida bajo tierra en épocas de guerra... desafiando a las bombas y los miedos...

Sin embargo hoy por la tarde me llamó Raquel, de cara al mar en La Paloma y saboreando un schopp helado, pidiéndome que los salude, que les diga que su computadora estuvo cerrada por refacciones de la Academia, que les diga que los quiere mucho a todos y que a su vuelta escribirá...

Sin embargo ZeRaymundo y Terezinha tanguearon la noche porteña, pese a mi ausencia prolongada, por exámenes y trabajo... Y me dejaron la confirmación de lo que siempre supimos de ellos: son dos seres maravillosos, llenos de afecto, de vida, de ganas...

Sin embargo, con Mitropa cerrada por vacaciones, pude ver y disfrutar el video de los 50 años de Xande, -con la presencia representativa del Negro Fogonero-, cuya copia en breve enviaré a tierras transandinas y cisplatinas...

Sin embargo, antes de la partida de Ari a Lima a pasar las fiestas con sus queridos padres, pudimos juntar nuestras vidas ocupadas una noche en el departamento de Recoleta, con Daniel y con Raquel, y -aunque me dormí estrepitosamente y no cumplí con la mateada mañanera prometida- fue lindo sentirlos otra vez cerquita del corazón...

Sin embargo, este mundo es hermoso... y, sin embargo, a veces es horrible... cuando a fin del milenio lo recorre la fotografía de un niño palestino muriendo por las balas israelíes bajo el vano intento de su padre de salvarlo... o las viejas y nuevas y eternas radiografías del hambre y la miseria... esas imágenes terribles que no logro borrar ni un instante... ni siquiera -y quizás como homenaje- en el preciso momento de levantar las copas y abrazarnos...

Amigos míos queridos. Está cayendo la noche del primer día del primer año del vigésimoprimer siglo del tercer milenio.... y parece mentira que tanto tiempo haya pasado en vano... que la humanidad haya crecido tanto y no haya aprendido nada...

Somos tiempo... estamos hechos de tiempo...

Como decía el poeta:

"Tu materia es el tiempo. El incesante

tiempo. Eres cada solitario instante."

y sin embargo...

Amigos queridos, la Mitropa está abierta. Ese espacio de amistades y cariños compartidos, de consenso y de disenso, de reflexiones y emprendimientos, ha vuelto a abrir sus puertas y las sillas y las mesas esperan nuestra presencia...

Hace calor, mucho calor en Buenos Aires... Los echo de menos... Los extraño... Estoy con saudade...

Cierro los ojos y los pienso.

Me hacen falta.

Los quiero.

No saben cuánto los quiero.



Lili

sábado, 8 de mayo de 2010


Gozo la paz de la mañana.
El humo de mi café de las primeras horas,
la soledad fresca,
el despertar de las plantas y los gatos.
A esta hora en que todo dolor se apacigua
y toda esperanza reverdece.

 
 
Baires, 19/11/82

SOLES

Alguien (no sé quién) lo escribió una vez en la Unidad 2 de la cárcel de Devoto.
Me parecio hermoso:


Podría contarte acaso cómo son mis días

mis días sin tiempo concreto

mi tiempo tal vez sin horas aquí

mi infinita nostalgia desparramada

mi paso lento, lentísimo como nunca

y también

las tantas lunas llenas

que atravesaron de lado a lado mi cama

invariablemente noche a noche

y también

de las mariposas de las que te hablé una vez

que dejé escapar entre mis dedos

la última primavera sin darme cuenta.

Pero ciertamente te diría

que todos mis días tienen soles

que pelean hasta vencer al infalible gris

que acosa

el sol de tu mirada

la dulce y tierna alegría de una sonrisa

y los pequeños soles insospechados

que amanecen todos los días

y descubro uno y otro

y no me canso.

ABER, BITTE, MIT SAHNE...

Buenos Aires, otoño de 20.10, sábado 8 de mayo


El maravilloso sol de esta tarde de otoño colorea la brisa fresca que mueve las ramas de mis árboles...
Hay hojas amarillentas, ocre, naranja, desparramadas por todas partes.
Mi tilo se ralea día a día y deja al sol acariciar sus ramas. El cielo, a su través, es de un intenso azul.
Los equinoccios tienen eso: la suavidad de bisagra aceitada, ese pasaje lerdo y extendido de verano a invierno y de invierno a verano.
Y así giran los siglos, en su ritmo circular y espiralado...
Amo la vida.
Agradezco todo lo que me dio.
Dure ella cuanto dure.


lunes, 3 de mayo de 2010

Maninho


Se lembra do futuro
que a gente combinou.
Eu era tão criança e ainda sou...


sábado, 1 de mayo de 2010

Karl-Marx-Stadt, 6 de julio de1980





Si alguna vez escribí en servilletas de papel de Buenos Aires
de sus cafés de bohemios y atrevidos
por qué no he de hacerlo aquí, en esta ciudad,
en un bar sin puerto ni arrabal
donde no hay cómplices ni mendigos
que entiendan de esta soledad.


Halle/Saale, sábado 6 de agosto de 1977

Balconcito triste
de paredes de ladrillo y hollín
y geranios ardientes.
Tarde de sol tibio
ropa tendida.
San Telmo me vuelve a los ojos.
Pero no. Buenos Aires está lejos.